En su temporada de retiro, el alemán Sebastian Kienle sigue seleccionando las pruebas en las que competirá este año.
Después de elegir competir por primera ocasión el IRONMAN de Nueva Zelanda, ahora, Kienle seleccionó el famoso Norseman.
Será el próximo 5 de agosto cuando el triatleta germano forme parte de esa escena ya reconocida mundialmente.
El Norseman dará comienzo un vez más con el salto de sus 265 participantes desde la popa de un ferry en las oscuras y gélidas aguas de Eidfjord.
«Si tus sueños no te asustan, entonces no son lo suficientemente grandes», escribió el campeón del mundo IRONMAN, en su cuenta de Instagram, donde ha comunicado su participación un evento desafiante.
«Sí, estoy un poco asustado. Mi sueño es ganar la edición de 2023».
Sebi se enfrentará a los 3.8 km de natación de un fiordo conocido por estar bañado con hielo derretido, 180 km de ciclismo con cinco ascensiones y 42 km de carrera a pie que culminan tras más de 17km en continua ascensión en la cima del Monte Gaustatoppen, a 1,850 metros de altitud.